El ICO califica de "irresponsable" el uso del fingerprinting para el tracking publicitario de Google
El regulador de data del Reino Unido, la Oficina del Comisionado de Información (ICO), ha criticado severamente a Google por su reciente decisión de permitir a los anunciantes rastrear a los usuarios a través de "huellas digitales". Esta técnica, que recopila señales únicas de software o hardware de un dispositivo para identificar a los usuarios, plantea serios riesgos para la privacidad, según el ICO.
El organismo aseguró que a los usuarios les será más complicado bloquear este tipo de rastreo, a diferencia de las cookies tradicionales, que pueden gestionarse a través de ventanas emergentes. En un comunicado, el ICO señaló que esta práctica socava la capacidad de los consumidores para controlar cómo se recopilan y utilizan sus datos personales.
Según informa The Guardian, el uso de huellas digitales o 'fingerprints', que Google implementará a partir de mediados de febrero, ha sido justificado por la empresa como una herramienta para que las marcas lleguen de manera más efectiva a sus audiencias en SmartTVs, servicios de streaming y consolas de videojuegos conectadas a internet y todo lo referente a CTV. Google también afirmó que los avances tecnológicos recientes han mejorado la privacidad en este ámbito.
Críticas por un cambio de postura
Sin embargo, esta decisión contradice declaraciones anteriores de Google. En 2019, la empresa afirmó que las huellas digitales subvertían la elección del usuario, ya que, a diferencia de las cookies, no pueden eliminarse ni gestionarse fácilmente. "Creemos que esto subvierte la elección del usuario y está mal", declaró entonces la compañía.
Por su parte, Stephen Almond, Executive Director for Regulatory Risk del ICO, calificó la medida como "irresponsable" y advirtió que las empresas no tienen libertad para implementar estas tecnologías sin cumplir con las leyes de protección de datos. “Al igual que cualquier tecnología publicitaria, debe desplegarse de forma legal y transparente; si no es así, el ICO tomará medidas”, afirmó Almond.
Impacto en la industria publicitaria
El ICO también señaló que el fingerprinting podría reemplazar las funciones de las third-party cookies, las cuales han sido el centro de múltiples debates en los últimos años. Según el regulador, este cambio podría reducir aún más la capacidad de los consumidores para elegir cómo se recopila su información y podría violar las leyes de protección de datos al no ofrecer opciones claras de consentimiento.
Por su parte, Google respondió que discutirá los detalles de esta decisión con el ICO y defendió su estrategia como una forma de equilibrar las necesidades de privacidad con las demandas de los anunciantes. "Seguimos brindando a los usuarios la posibilidad de elegir si desean recibir anuncios personalizados y trabajaremos con la industria para fomentar un uso responsable de los datos", aseguró un portavoz de la compañía.
El caso subraya la creciente tensión entre la industria tecnológica, los reguladores y las preocupaciones de los consumidores sobre la privacidad en la era digital. Mientras los anunciantes buscan métodos más avanzados para llegar a sus audiencias, los reguladores insisten en que la privacidad debe seguir siendo una prioridad.
El debate en torno al fingerprinting podría sentar precedentes importantes sobre cómo se gestionan las tecnologías emergentes en el ámbito publicitario y el equilibrio entre innovación y protección del consumidor.