YouTube propone enfocarse en la conexión emocional con la audiencia para medir la calidad del vídeo
YouTube ha publicado un nuevo informe titulado "Why We Watch 2.0", en el que redefine lo que significa el contenido de vídeo de alta calidad, centrándose en los marcadores emocionales que conectan a los espectadores con los creadores. Según el informe, la calidad de los vídeos ya no se mide únicamente por estándares técnicos, sino también por la capacidad de contar historias, la autenticidad y la relevancia del contenido para las audiencias.
En un estudio realizado a más de 2.000 espectadores de vídeo en Reino Unido, el 90% de los encuestados coincidió en que el contenido de calidad debe satisfacer tanto los aspectos técnicos como los emocionales. YouTube argumenta que los avances tecnológicos, como los smartphones y las herramientas de inteligencia artificial, ya garantizan una base técnica sólida, por lo que la conexión emocional entre los creadores y su audiencia se ha convertido en el factor clave para definir la calidad.
"La calidad técnica se ha vuelto la norma, pero ahora lo que realmente define el contenido de calidad es la conexión emocional que los espectadores desarrollan con lo que eligen ver", comenta a Videoweek Erica Probst, Head of YouTube Sales UK&I. Esto marca una ruptura con la visión tradicional, que priorizaba los estándares técnicos sobre otros factores.
YouTube sostiene que la democratización del contenido, liderada por los creadores, ha desplazado a los "gatekeepers” tradicionales, como los medios de comunicación y broadcasters, dando lugar a nuevos hábitos de visualización. Un ejemplo destacable en el informe es el del YouTuber Mark Rober, cuyo vídeo de 2022 obtuvo 5 millones de visitas en sus primeras 24 horas, superando al final de la serie Succession en HBO, que alcanzó 2,9 millones de espectadores en su estreno.
Aunque algunos críticos y anunciantes aún argumentan que las impresiones en YouTube no tienen el mismo valor que las de la televisión, YouTube destaca que el vínculo emocional que los usuarios desarrollan con los creadores hace que los anuncios sean mejor recibidos. De hecho, el 61% de los espectadores del Reino Unido afirmó que no les molestan los anuncios en YouTube si se sienten personalmente relacionados con ellos, en comparación con el 45% que dijo lo mismo sobre la publicidad en televisión.
Este cambio también está generando una dinámica bidireccional, en la que el 71% de los espectadores influye en las decisiones de los creadores sobre qué contenido producir. Aunque este fenómeno también se observa en la televisión, YouTube enfatiza que la relación entre creadores y audiencia es más personal en su plataforma, dada la inmensa cantidad de contenido disponible.
YouTube y la batalla por el televisor
A pesar de que el 34% del tiempo de visualización de YouTube en el hogar ocurre en televisores, su contenido, salvo algunas excepciones, no cumple con la definición de contenido apto para televisión según el organismo de medición del Reino Unido, Barb. Esta definición incluye supervisión editorial y cumplimiento normativo, áreas en las que YouTube, con su moderación de contenido mayormente automatizada, aún no alcanza los estándares requeridos.
Sin embargo, YouTube argumenta que su proceso democratizado es precisamente lo que fomenta un entorno diverso y de calidad, permitiendo que los espectadores se conecten emocionalmente con los creadores. "Estamos redefiniendo lo que la calidad significa para nosotros como espectadores", señala Probst. "Ya no se trata solo de estándares técnicos, sino de encontrar contenido que se relacione con nuestras necesidades e intereses en cada momento", añade la experta.
Además, YouTube reafirmó su compromiso en brand safety, asegurando que sus políticas siguen vigentes desde el cierre de GARM, y que siguen colaborando con los anunciantes para garantizar que la plataforma mantenga un "estándar primordial" en cuanto a brand safety y brand suitability.
Este enfoque emocional y la capacidad de conectar personalmente con los espectadores parecen estar posicionando a YouTube como un importante player en la transformación del concepto de calidad en el mundo de los medios digitales.