IAB Tech Lab presenta su nueva taxonomía de productos publicitarios 2.0

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IAB Tech Lab ha anunciado el lanzamiento de su nueva taxonomía de productos publicitarios 2.0, que está disponible para comentarios públicos desde ayer 15 de agosto. “Sabemos que la seguridad de las marcas es una gran preocupación del sector, pero reconocemos que actualmente existen soluciones limitadas que ayudan a los publishers y a sus usuarios a distinguir qué contenido publicitario es apropiado para sus audiencias”, dicen desde la entidad publicitaria.

“Es muy importante que los publishers sepan qué aparece junto a sus contenidos y tengan la capacidad de bloquearlos correctamente cuando sea necesario. Esperamos que esta taxonomía actualizada, creada específicamente para identificar los productos de los anunciantes, facilite su identificación y contribuya a proporcionar una importante capa de datos a los publishers”, añaden.

Una vez que se hayan completado los comentarios públicos y la taxonomía de productos publicitarios 2.0 esté en producción, se publicará un registro de cambios completo en el nuevo repositorio GitHub de Taxonomía de IAB Tech Lab.

¿Qué cambia con respecto a otras taxonomías?

IAB Tech Lab explica que la taxonomía de productos publicitarios 2.0 se centra en los productos, no en los conceptos. Por ejemplo, dentro de la actual Taxonomía de Contenidos, el alcohol aparece en Alimentos y Bebidas. Aunque puede ser apropiado para una reseña de restaurante o un blog de recetas hacer referencia al alcohol, un anuncio real de un producto alcohólico es muy diferente y plantea verdaderos problemas a los publishers, como señalan en su web.

Al centrarse en los propios productos, se ha podido crear una nueva taxonomía que se ajusta mejor al caso de uso de un publisher, que intenta comprender y gestionar las creatividades publicitarias entrantes.

Uno de los objetivos de IAB Tech Lab ha sido aportar simplicidad para facilitar la adopción de esta taxonomía que, aunque presenta tres niveles de granularidad, no todos los socios de demanda van a ser capaces de rellenar datos más allá del nivel 1.

En la arquitectura de la nueva taxonomía, el organismo se ha centrado en diferenciar las categorías de nivel 1 que podrían causar riesgos de seguridad de marca para los publishers. Los niveles 2 y 3 incluyen información más detallada que puede utilizarse para adaptar mejor el contenido de los anuncios a la audiencia.

Este es el resumen de la actualización de la taxonomía de productos publicitarios de 1.0 a 2.0:

  • Categorías comúnmente bloqueadas trasladadas a la T1 :

    Cannabis

    Bienes duraderos

    Moneda no fiduciaria (criptomoneda)

    Dieta/Pérdida de peso

    Salud sexual

    Contenido para adultos

    Alcohol

    Juegos de azar

    Política

    Religión y espiritualidad

    Tabaco

    Armas y munición

  • Aplicaciones trasladadas a sus respectivas categorías

    Ej. Aplicaciones de Educación trasladado a Educación y Carreras

  • Propiedad de automóviles se ha cambiado a Vehículos

  • Minoristas se trasladó a T2

  • Industriales se trasladó a T2

  • Experiencias y eventos se traslada a T2

  • Comestibles eliminado de CPG

  • No comestible eliminado de CPG

  • Automoción eliminado de CPG

  • Eliminación de artículos específicos de mobiliario

  • Eliminación de artículos de ferretería específicos

  • Eliminación de eventos vitales

  • Adición de metales a T1

  • Supresión de software T1

  • Supresión de material deportivo específico

  • Reducción del número de niveles de 5 a 3

  • Reducción significativa del número de filas

¿Por qué deberían adoptarla los publishers?

Según IAB Tech Lab, “la adopción de la Taxonomía de Productos Publicitarios 2.0 debería ser una prioridad para todos los publishers”. El argumento principal es que la compatibilidad abre una serie de beneficios y protecciones no disponibles con taxonomías anteriores al poder identificar, segmentar y bloquear anuncios entrantes de forma más granular.

Una de las mayores ventajas de una mayor granularidad es que permite a los publishers ajustar sus estrategias de bloqueo existentes para encontrar nuevas bolsas de demanda. Por ejemplo, un publisher puede querer rechazar anuncios de productos farmacéuticos, pero seguir aceptando anuncios de medicamentos sin receta o vitaminas. Las taxonomías anteriores no admitían este tipo de bloqueo por categorías y los publishers tenían que rechazar toda la demanda relacionada. Al tener granularidad en la categoría del anuncio, los medios ya no tendrían que dejar ese presupuesto sobre la mesa.

Pero aún más importante es la mejora de la seguridad de la marca. Un mejor conocimiento de los anunciantes puede ayudar a los publishers a crear una experiencia publicitaria más acorde con su audiencia y sus valores. Las malas experiencias publicitarias son una de las principales causas de pérdida de usuarios, pero pueden evitarse mediante un bloqueo de anuncios más intencionado.

Una identificación más sencilla de los anunciantes con un número significativamente menor de filas se traduce en una mejor monetización, una mayor seguridad de la marca y una mejor experiencia para los usuarios finales, tal y como explican desde la entidad.

¿Por qué deberían adoptarla los anunciantes?

La taxonomía de productos publicitarios 2.0 también beneficia a los anunciantes. Igual que una mayor fidelidad en el bloqueo de categorías de anuncios puede ayudar a la parte de la venta, cuando se bloquean innecesariamente menos ofertas se ayuda a los socios de la demanda a ampliar su oferta con nuevas oportunidades. Una mayor granularidad también abre la puerta a la colaboración entre la oferta y la demanda para encontrar anuncios de productos que se ajusten mejor al contenido con el que se publican.

Asimismo, esta nueva taxonomía puede ayudar a los anunciantes en cuestiones normativas, puesto que permite a los anunciantes identificar mejor productos como el alcohol, el tabaco, la marihuana, el CBD y los productos farmacéuticos para evitar solicitar anuncios de inventarios en los que están prohibidos.

Aunque desde IAB Tech Lab creen que la nueva taxonomía de productos dará lugar a anuncios más relevantes y a una mejor monetización cuando haya una coincidencia, ofrecen algunas indicaciones para garantizar “una implantación limpia”.

  1. Hablar con los socios de la demanda sobre el calendario de soporte

  2. Revisar la taxonomía para ver cómo encaja con las políticas y contenidos de cada medio y anunciante.

  3. Añadir nuevas categorías bloqueadas a las listas de bloqueo existentes

Fuente: IAB Tech Lab

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