Democratizar la tecnología gracias al videomarketing, por Carlos Sánchez, CEO de Snippet
Según el último estudio de IAB sobre el impacto del videomarketing en el consumidor, prácticamente 8 de cada 10 usuarios han reducido alguna actividad por ver vídeo online, en este sentido las categorías que más han sufrido son la TV tradicional y el cine. Y respecto a la introducción de publicidad a cambio de consumir contenidos o programas de forma gratuita, los consumidores están de acuerdo en un 61,4%.
Con relación a las empresas, el 93,6% de los profesionales piensa que el vídeo online en la publicidad contribuye a cumplir los objetivos de las campañas, con un 85,1% que cree que el vídeo puede ayudar a la conversión. De hecho, una encuesta de Renderforest señaló que los vídeos en campañas de marketing ayudan a las empresas a aumentar el reconocimiento de marca en un 70%, el tráfico en un 51% y las ventas en un 34%.
Con estos números parece interesante plantearse realizar campañas de videomarketing de forma estable, sobre todo con la facilidad de acceso a los recursos que existe en la actualidad. Una de las grandes oportunidades que ofrece el videomarketing es que ahora no hace falta tener un presupuesto grande para poder grabar vídeos de calidad: basta con un móvil, buena iluminación y un micrófono para grabar el sonido con nitidez. Además, con las plataformas de redes sociales es más fácil que nunca llegar a tu público objetivo.
Por el contrario, si la compañía necesita algo más profesional, también existen plataformas con recursos ilimitados para grabar vídeos totalmente personalizados, como si una compañía estuviera hablando con su cliente de manera individual, dirigiéndose a él por su nombre y de forma personalizada. Estas nuevas plataformas buscan competir con las grandes multinacionales en marketing y publicidad, porque una buena campaña que impacte al consumidor no debe depender de un gran presupuesto dedicado a ello.
Este es uno de los grandes desafíos de la tecnología publicitaria: conseguir democratizar el acceso a los recursos profesionales para aumentar la competitividad de las organizaciones en el mercado, impulsar la digitalización empresarial y romper así con el monopolio de la mejor publicidad en manos de unas pocas organizaciones. Cualquier empresa, grande o pequeña, debe poder llegar a su consumidor de la mejor, más original y creativa forma posible.
No solo es importante subirse al carro del videomarketing porque sea el formato más consumido por los usuarios; también ofrece una serie de ventajas interesantes que lo convertirán sin duda en el formato preferido por las empresas dentro de la tecnología publicitaria:
Aumenta la tasa de conversión: está demostrado que explicar un producto o un servicio a través de un vídeo resulta más atractivo que un párrafo de texto escrito puesto que genera mayor confianza y seguridad en el cliente a la hora de realizar una compra.
Favorece el SEO de tu página web: los vídeos alojados en Youtube e incrustados en la web se posicionan mucho mejor en las primeras páginas de resultados de Google. Además, la visualización de vídeos aumenta el tiempo de permanencia del cliente en la página, lo que también favorece el posicionamiento orgánico de las páginas web en los buscadores.
Mayor efectividad y engagement: los vídeos estructurados en forma de Storytelling, es decir, que cuentan una historia apelando a las emociones de las personas y/o en clave de humor, transmiten cercanía y provocan que el cliente se sienta partícipe de la experiencia. Este sentimiento de confianza genera, normalmente, que aumente el engagement del cliente hacia la marca.
Mejora el recuerdo de marca: Según un estudio del Wharton Research Center, los humanos retenemos el 10% de lo que leemos o escuchamos, mientras que guardamos en nuestra memoria el 50% de lo que vemos. ¿Qué significa esto? Si quieres que el usuario recuerde tu mensaje o marca ofrécele información visual para asegurarte de que no se olvida de ti. Porque si te recuerda, volverá.
Destaca sobre la competencia: la inversión en videomarketing frente a la competencia te aporta un valor diferencial que a lo mejor tus competidores no tienen, haciendo que tus productos o servicios destaquen sobre los del resto.