Google insiste en que YouTube respeta las normas de privacidad tras un nuevo análisis
Después de que la compañía Adalytics sembrara serias dudas sobre el cumplimiento de YouTube de sus propias políticas publicitarias, Google, compañía propietaria de la plataforma de vídeo, ha querido una vez más despejar cualquier incógnita. En un comunicado firmado por Dan Taylor, vicepresidente de Global Ads, el gigante tecnológico afirma que sus sistemas “funcionan según lo previsto”. “Estamos orgullosos del trabajo que realizamos en este ámbito”, comienza el texto.
El pasado agosto, Adalytics publicó un informe que señalaba que YouTube estaba recogiendo datos personales a partir de los contenidos catalogados como “contenidos para niños”. Es decir, acusaba a Google de recopilar datos sobre los usuarios que ven vídeos infantiles en YouTube (más allá de los necesarios para el funcionamiento básico de la plataforma), algo que se había comprometido a no hacer. Esto incluye la publicación de anuncios basados en datos demográficos y de comportamiento, y el seguimiento de los usuarios que hacen clic en los anuncios.
Ya entonces, Google se defendió y explicó que mantenía a los niños y adolescentes seguros en Internet y que las prácticas de privacidad que aplicaba a los contenidos "hechos para niños" en YouTube eran las adecuadas. Ahora, Google insiste en su postura tras revisar las campañas en un análisis e indica las razones por las que, a juicio de la compañía, las afirmaciones de Adalytics son erróneas.
“Para llevar a cabo su análisis, Adalytics creó cuatro campañas dirigidas a 'canales infantiles' y activó la segmentación demográfica y de audiencia. Al finalizar la campaña, examinaron los informes de posicionamiento y de segmentos de audiencia proporcionados por Google. Adalytics afirmó erróneamente que los informes corroboraban las dudas que habían planteado en un principio”, apuntan desde Google.
“Igual que los informes anteriores de Adalytics, este informe está repleto de errores básicos”, explica Dan Taylor. “Adalytics no tuvo en cuenta el hecho de que los canales de YouTube (incluso los designados por el creador como infantiles) pueden tener una mezcla de contenidos. Aunque un canal se designe como destinado a los niños, un creador puede etiquetar sus vídeos individuales en su canal como no destinados a los niños para tener en cuenta la mezcla de contenidos”, sostiene.
“Su análisis ignora el hecho de que cuando los anunciantes utilizan 'segmentos de audiencia por afinidad' para personalizar sus campañas, no siempre dan como resultado anuncios personalizados. Estos segmentos se derivan de los datos de visionado de una persona (personalizados) o de señales contextuales derivadas de otros vídeos similares (no personalizados)”, continúa el texto.
Google insiste en que prohíbe la personalización de anuncios en contenidos hechos para niños en YouTube, independientemente de la edad del espectador. A pesar de las afirmaciones de Adalytics, los anuncios del informe no son personalizados y no indican una violación de sus políticas, señalan desde Google.
“Estos defectos en la investigación y sus conclusiones (sumados al hecho de que Adalytics sigue ignorando nuestra oferta de reunirnos y explicar cómo funcionan nuestros sistemas) socavan la credibilidad de su trabajo”, terminan.
Así se defendía Google el pasado mes de agosto
El pasado agosto, cuando Adalytics publicó su informe, Google rápidamente lanzó una respuesta explicando que la compañía tiene el propósito de ofrecer “una experiencia más segura en Internet a niños y adolescentes”, y asegurando que el informe sobre las políticas de privacidad para menores de 18 años en sus plataformas era “profundamente erróneo y desinformado”.
Esta investigación se suma a un informe anterior inexacto de principios de este verano sobre nuestro inventario de socios de vídeo. Posteriormente fue desmentido por varios terceros independientes, como DoubleVerify, IAS y Pixability.
Google en ese momento indicó que la compañía contaba con “estrictas protecciones de privacidad de anuncios en el contenido hecho para niños, independientemente de la edad del usuario”. “Desde enero de 2020, YouTube ha tratado la información personal de cualquier persona que vea contenido 'hecho para niños' en la plataforma como si procediera de un niño, independientemente de la edad del espectador. Esto significa que prohibimos la personalización de anuncios. Además, no permitimos el uso de rastreadores de terceros en los anuncios servidos en contenido hecho para niños en YouTube”.
Además, insistía en que la COPPA permite el uso de cookies en contenidos dirigidos a niños para prácticas como la elaboración de informes estadísticos, prevenir el fraude publicitario y evitar mostrar anuncios demasiadas veces.
“No vinculamos las cookies a la visualización de contenidos hechos para niños con fines publicitarios, y la actividad de un espectador en contenidos hechos para niños no puede utilizarse para la personalización de anuncios. Las cookies identificadas en este informe están cifradas y no pueden ser utilizadas por otra empresa tecnológica, anunciante, editor o intermediario de datos.
Estas cookies no permiten a las marcas anunciantes identificar quién es un usuario o qué vídeo ha visto”, decía el texto.
“Tanto si estás en la aplicación YouTube Kids como si estás viendo contenidos para niños en YouTube o has iniciado sesión con una cuenta supervisada, tenemos políticas estrictas sobre el tipo de contenido publicitario que permitimos. Aunque permitimos la publicidad para apoyar a los creadores que hacen contenidos de alta calidad para niños, estas directrices limitan los tipos de productos y servicios que pueden aparecer junto a sus contenidos”, seguía.
Como ejemplo, Google afirmaba que restringe los anuncios de aplicaciones de citas y productos de alimentación y bebidas, así como los anuncios con contenido violento o gráfico. Estas restricciones son similares a las empleadas por otras industrias, como la televisión, que tiene sus propias directrices para los contenidos publicitarios que se emiten en canales o contenidos infantiles.
En conclusión, los anunciantes controlan totalmente dónde se publican sus anuncios y la plataforma mantiene las protecciones para niños y adolescentes. “Hemos invertido mucho tiempo y recursos para proteger a los niños en nuestras plataformas, especialmente en lo que se refiere a los anuncios que ven: desde la creación de productos específicos para niños, como YouTube Kids o las cuentas supervisadas, hasta el lanzamiento de una restricción global de anuncios personalizados y categorías de anuncios sensibles a la edad para todos los usuarios menores de 18 años”, terminaba el comunicado del pasado verano.
Fuente: Google Blog