Un grupo de ejecutivos “recompra” Bidstack tras explorar varias vías fallidas de financiación

Bidstack, una plataforma especializada en in-game advertising, ha tenido un mes de marzo algo movido. Suspendió hace unas semanas su cotización en la Bolsa de Londres tras un intento fallido de asegurarse un comprador. La empresa declaró que suspendía sus acciones a la espera de que se aclarase “la situación financiera de la empresa".

Bidstack, cuya cotización ha caído un 61% desde principios de 2024, un 88% en el último año y un 98% en los últimos cinco años, había estado explorando una serie de "alternativas de financiación" como parte de una revisión estratégica, que incluía una posible venta de sus activos, según el medio ShareCast.

El pasado viernes, en un giro inesperado, la empresa fue adquirida por “ella misma”: un equipo de ejecutivos de Bidstack, encabezado por su fundador y consejero delegado, James Draper, recompró la empresa a inversores y accionistas. Los contratos con los clientes continuarán bajo la nueva propiedad, que es, en realidad, la misma que la antigua, y se mantendrá la plantilla actual, según un comunicado de prensa.

Bidstack habría ofrecido sus activos a 200 compradores potenciales antes de que el equipo ejecutivo hiciera su oferta. La trayectoria descendente de Bidstack plantea preguntas incómodas para el sector del mobile gaming. Bidstack es uno de los pocos especialistas notables en la categoría, junto con empresas como Anzu y Frameplay.

Los desarrolladores de juegos para móviles han luchado mucho, y hay una inevitable repercusión en la industria adtech centrada en in-game. De hecho, con un mercado más pequeño, los desarrolladores de mobile gaming han añadido aplicaciones en otros verticales. Draper afirma que Bidstack mantiene su compromiso con los anuncios in-game, pero también redoblará su apuesta por las licencias de propiedad intelectual de deportes profesionales para activaciones virtuales en juegos y otros ámbitos.

Fuente: AdExchanger

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