La plataforma Brand Advance, dedicada a vincular la oferta de diversos medios con la demanda de los anunciantes, ofrece a estos últimos la posibilidad de medir y reducir la huella de carbono de sus campañas digitales, gracias a su asociación con la plataforma publicitaria Good-Loop.

Gracias a la etiqueta publicitaria ecológica de Good-Loop, que permite a los anunciantes controlar en tiempo real, medir, rastrear y reducir la huella de carbono de la compra programática, Brand Advance puede permitir a sus marcas y agencias asociadas llegar a sus diversas audiencias de una manera más respetuosa con el clima. Las empresas dijeron que era demasiado pronto para compartir detalles de los socios de marca que utilizan esta función.

"La etiqueta de seguimiento se añadirá a las campañas de Brand Advance", explica Amy Williams, directora ejecutiva y fundadora de Good-Loop. "La etiqueta rastreará aspectos como la geografía, el número de impresiones, la hora del día, el dispositivo del consumidor final y creará un informe sobre la campaña publicitaria para medir su huella de carbono".

Una campaña publicitaria online media emite 5,4 toneladas de carbono, es decir, un tercio de lo que produce un consumidor estadounidense al año, según Good-Loop. Mientras tanto, las emisiones impulsadas por la publicidad han aumentado un 11% entre 2019 y 2022, según un estudio reciente de Purpose Disruptors. Con las regulaciones en camino, la necesidad de reducir eso se ha vuelto más urgente. Aunque acordar una medición estándar de las emisiones de carbono ha sido una de las dificultades para el sector de AdTech que busca ser ecológico, gigantes tecnológicos como Yahoo han firmado acuerdos para que sus compras de medios sean más sostenibles, mientras que SSP OpenX ya ha alcanzado el cero neto.

Según Williams, el coste de compensar de forma sostenible una campaña publicitaria suele ser del 0,003% del gasto de la campaña. Sin embargo, la mayoría de los anunciantes tienen que justificar el coste en sus beneficios y pérdidas, y se convierte en una decisión que debe tomarse junto con el rendimiento y los presupuestos.

Por ello, Brand Advance ofrece por defecto la etiqueta verde en todas sus campañas a sus 50 marcas asociadas en todo el mundo, incluida Meta, sin coste adicional. Brand Advance también trabaja con Apple, Unilever, Converse y Diageo, según su sitio web.

"Queremos llegar a unas 100 marcas a finales de año", afirma Christopher Kenna, Consejero Delegado para Norteamérica y fundador de Brand Advance Group.

Gracias a esta asociación, los anunciantes pueden controlar dos parámetros en la compra de medios: el primero es el número de anuncios destinados a audiencias multiculturales.

"Esto es crucial para sus informes sobre diversidad", afirma Williams.

Los anunciantes también pueden controlar el impacto que sus campañas publicitarias han tenido en el planeta a través de sus esfuerzos en materia de carbono, como la plantar árboles.

"Aunque hay mucha retórica y conversaciones", dice Williams, "esta asociación ilustra al sector sobre las medidas que pueden tomarse".

Fuente: Adweek